Resiste

No voy a mentir. Soy una persona que piensa que es valiente resistirse a la verdad.
Soy de esas que piensa que mientras no admita algo no puede hacerme daño, que mientras diga no, estoy a salvo de las consecuencias.
Sin embargo, no soy de ese tipo de personas que se esconde de los problemas y que huye. Es más, si tengo que partirme la cara con quien sea, me la parto.

El amor, es otro de tus mentiras


+ ¿Qué me dices si te digo que no creo en el amor?

- Que eres tonta, porque el amor existe.

+ ¿Por qué estas tan seguro? ¿Lo has visto alguna vez?
- Claro que sí. Lo leo en tus ojos cuando le miras a la cara, lo noto en tus brazos cuando estas cerca de él. Lo veo en tu sonrisa cuando te dice que se alegra de verte. Lo siento en tu forma de andar cuando caminas al verle. Y cuando él te mira, veo como tratas de ocultarlo para que no se de cuenta de que le quieres. Noto como intentas no moverte para evitar abrazarle. Leo en tu sonrisa la mentira y siento como aprietas los labios para que no se te escape un “te quiero”. Sin embargo te ocultas detrás del “No creo” porque piensas que es valiente resistirse a la verdad.


Eres tú quien corre tras la vida

Ya he perdonado errores casi imperdonables. He tratado de sustituir personas insustituibles. Me he olvidado de personas inolvidables. Ya he hecho cosas por impulso. Me he decepcionado con algunas personas y seguramente yo también he decepcionado a alguien. Me he reído cuando no podía. Ya he conocido a gente que me ha enseñado la amistad. Ya he gritado y saltado de felicidad. He llorado escuchando música y viendo fotos. He llamado sólo para escuchar una voz. Ya me he enamorado por una sonrisa. Ya he pensado que iba a morir de tanta nostalgia... y tuve miedo de perder a alguien especial. Y aún así, esto no es nada con todo lo que me queda por delante.Y echo de menos a personas que han sido y serán siempre las que más me han querido.;

Sei la tua ragazza ...

Es tan simple. Tan sencillo..
Si me preguntaran que es lo que busco en una persona especial, solo podría responder : alguien que me llame ragazza al oido, y me haga callar con un beso.

Juega tu último as.





Me contoneo. Sin rumbo. Sin ritmo. Sin prisa por ir a ningún lugar. Ladeo la cabeza. Dejo que el viento de febrero me acaricie la cara. A través de mis ojos medio abiertos veo las luces de la ciudad. Oigo el murmullo de la noche. Yo sola me adentro en la oscuridad. Estoy tan borracha. Me cuesta andar. Doy tres o cuatro pasitos más. Me paro a respirar.
Voy que me como el mundo, voy que quemo la ciudad. Soy una carta más en la baraja, no tengo por que destacar. Allí que voy, aunque me tenga que arrastrar. Lady JB dame un trago más para continuar.
Alguien me elige para entrar en su vida, así, sin más. Esta es mi mano de cartas. Esta es la partida que voy a ganar.

A veces, mezclo conceptos.



Ya nada me inspira. Calmo mis ansiedades cigarro en mano, mezclado con el sabor de los chicles de menta, a lo que últimamente soy adicta. Me siento a escribir y tan siquiera puedo pensar dos frases que coordinen. La inspiración ya no se donde quedó, ni con que acto la perdí, y para ser sinceros, cada día veo mas cerca la expiración de mis palabras sobre un papel Ya no me salen palabras del corazón, ni tan siquiera de la imaginación. Ahora improviso, y a veces dudo de que lo que hago, ni entiendo muchas veces ya lo que escribo. No se si es locura, si es una etapa, si es que ya no tengo nada ni nadie a quien de verdad quiera escribir, o si es que alguien ha matado mi frágil alma de soñadora con una bala en forma de silencio. La verdad es que ni siquiera se por que escribo esto, no lo necesito, otras veces he necesitado escribir para saciar el dolor, para callar bocas, para hacer sentir. Hoy, es necesario mucho mas que un texto para saciar el dolor que aunque sea jodidamente extraño proviene del mismo sentimiento que hace que los miércoles sean mis días favoritos, y de la persona que entonaba en sus labios que los viernes siempre me rizaba el pelo. Lo de callar bocas, eso es punto y aparte, me estoy volviendo partidaria del callar bocas a ostias y no con palabras pero eso es otro tema. Lo de hacer sentir, si bueno... Solo una vez en mi vida he escrito para hacer sentir. A una persona. A la persona. A esa en la que yo hubiese confiado mi vida, y con la que ahora tan siquiera cruzo palabra cuando paso por su lado. Ya no es la persona. Supongo que nunca lo fue... Siempre fue un desconocido, por el simple hecho de que no se lo que hace los domingos por la tarde [...]
Curiosamente estoy escribiendo esto, para decir que ya no me sale escribir. Paradojas irresolubles ... Sin tener que volverlo a leer, puedo decir que esta está entre las 5 cosas más raras que escrito. Y por lo tanto aun me quedan por escribir otros 4 textos que nadie creo llegue a ser capaz de comprender.Y aquí lo dejo, por que el corazón ya se cierra y deja las palabras a medias en el aire.

Si me conocieras..

Si me conocieras de verdad sabrías que todo el tiempo siento que me estan juzgando y que esperan muchas cosas de mi..

Hacia ninguna parte..


Por que hasta los malos momentos se graban en ti como muescas que haces a un arbol con un cuchillito. "Al final del camino de la vida, no te preguntarán "que tienes", sino "quien eres" ¿Cuál será tu respuesta?" Es una gran frase, y vivir pensando en ella creo que es una manera bastante positiva de avanzar. Supongo que hoy en dia vivimos bastante ocupados en nuestros quehaceres, nuestros pensamientos que se nos olvida respirar hondo y poner en ON el "Modo: empatia", sentarnos uno frente al otro y no decir palabras sin sentido, conversaciones absurdas que llenan mi cabeza de pajaros, contarnos lo que realmente sentimos y ver el alma en nuestros ojos.

palabras que taladran los oidos


Voy en este viaje al centro de mi corazón subido en el sonido de un silbido que me conquistó. A veces la ilusión se queda pálida,me quedo sin colores cuando estoy frente la más jodida realidad. Quise entrar por tu mirada y se que volveré por el camino de las lágrimas. Es lo que tiene ser intruso del uso del amor más insulso, que incluso la alegría me pregunta cada día que si casi se me olvida que no la puedo ignorar... Le digo que tristeza es la que mejor me besa cuando la noche comienza y no pienso en nada más. Te vas y no quiero que vuelvas más pero desde que te espero el tiempo se ha vuelto más áspero. Saqué de mi boca el anzuelo y hablé con las colillas que dejaste en cada cenicero pero no sabían nada de eso, sabían un poquito nada más a restos de tus besos al humo de tu cuerpoa la imperfección de la añoranza que nos otorga el recuerdo.

Alguien dijo un DON NO

Esta bien ser normal cuando quieres ser normal, pero ¿esta bien ser normal cuando quieres ser especial?

Tan solo me separa una cifra de todo eso.



Hoy, mirando fotos, he encontrado algunas que de verdad me han tocado el corazón
Tanto me lo han tocado que he acabado llorando.
Son fotos normales, en las que salgo sola, con mis amigas, con mis primos...
Fotos que al mirarlas me traen muchos recuerdos. Para cualquier persona esas fotos serian fotos sin más, en las que tengo el pelo distinto u otras gafas, pero para mi esas fotos signifícan un cambio. A esas fotos las separa de hoy, no días , ni años, si no 15 kilos. 15, que pesaban mas en el corazón que en cualquier otro sitio.

Hay personas de las que la gente se ríe por que son demasiado altas, bajas, feas, con la nariz rara, los ojos vizcos, los dientes mal o porque están gordas.
Y ahora, este ya no es mi caso, es más queda muy atrás para mi y aprendí a pasar de los insultos, de las bromas, de las risas.
Y aunque esto queda ya atrás, no se me va a olvidar todas las veces que lloré cuando solo era una niña porque se habían reído de mi, o por que habían hecho una broma con mi peso.
Las cosas cambian, como lo he hecho yo, pero eso no quita el que yo no me olvide de lo que un día tuve que oír, de lo mal que me hicieron sentir, y de que yo no podía hacer nada por cambiarlo.

Solo una persona sabe, lo mucho que me costó mirarme a un espejo y decir esta soy yo, sea como sea, no soy lo que los demás ven, si no lo que valgo. Solo ella sabe las cosas que yo llegué ha hacer, y de las que después tuve que arrepentirme..

Me es muy difícil comprender por que unos kilos tienen que marcar diferencias entre unas personas y otras. No creo que nadie sea menos inteligente, menos amable, cante peor, sea mas feo o peor persona por pesar algún kilo más que otro. Las personas, somos personas, midamos lo que midamos, pesemos lo que pesemos, y sobre todo, somos personas por que sentimos, y no creo que nadie deba hacer sentir mal a nadie por unos putos kilos, que en realidad nada significan.

Es por eso, por lo que me mata escuchar día tras día a mis amigas decir: que gorda estoy, cuando pesan 55 kilos, decir : que culo más gordo tengo, y les entra una 38, es oírles decir: es que no le voy a gustar a nadie por que estoy muy gorda, y pesan 63 kilos.
Y por que se que hay personas que seguramente tendrán que seguir aguantando que les llamen mil cosas, que se rían de ellos, y muchas más cosas que por fortuna para mi ya pasaron. A esas personas, sólo quiero decirles, que por favor, se quieran y no se dejen de querer porque la gente diga cosas, por lo que de verdad son es lo que ellos quieren ser, y no lo que les hacen creer.

Quizá fue por todo eso, por lo que yo aprendí a mirar un poquito más allá de todo de fuera, y me molesté en aprender a buscar siempre más en lo de dentro.

Miradas inocentes




Miradas inocentes, tan solo eran eso, pero para mí era algo mas, era hacerme sentir miedo de decir te quiero, era un mundo en el que nos perdíamos tú y yo, un mundo de lagrimas adornando las escasas sonrisas que de vez en cuando lanzaba al viento, era algo mas que tus ojos mirando los míos, era mi sonrisa, mi alegría, mi miedo, mi todo.





¿Algo como tus ojos me puede ayudar a sonreír?.



Era tan evidente que ni cabía la duda de que la respuesta a esa pregunta fuera no, tan evidente por que al ver tus ojos del color de la coca-cola se dibujaba una sonrisa en mi cara de niña inocente.



Con el tiempo perdí el miedo a tus miradas, perdí el miedo a decirte te quiero con solo mírate, se perdieron las miradas inocentes y empezaron a ser miradas pícaras, que expresaban algo mas que inocencia, nunca habíamos hablado ni siquiera sabia como se llamaba, no le conocía más que de vista, aunque cada vez que nuestras miradas se cruzaban me lo decía todo, era como si su mirada me lo dijera todo sobre él.



Un día al llegar a clase nuestras miradas se cruzaron a la vez que me decía: Hola, soy Dani y ¿Tu como te llamas?.



No sabia como contestarle, silabeando dije: Hola yo soy Mery.



Llego la hora del recreo, la pasamos hablando, y esa misma tarde quedamos en el parque.



Pase toda la mañana esperando la tarde; esa tarde llego fui al parque y allí estaba Dani, sentado en un banco, esperándome.



Me acerque a él y le salude, no me devolvió el saludo, simplemente me besó.



Vivimos un apasionado amor durante varios años, pero un día, el desapareció, ni siquiera se despidió, se marcho sin más, ni siquiera me dijo adiós.



Lo pase muy mal, pero crecí y lo supere. Un día al cabo de muchos años iba caminando por la calle y vi, volví a ver esos ojos del color de la coca-cola, era él, intentó mantener la mirada pero yo enojada la aparté y seguí mi camino, me marche de allí, no quería ver más eso ojos, no le quería ver.



Ese mismo día, en la huida de su mirada, al ir a cruzar la calle me atropelló un coche delante de Dani, que me causó amnesia y solo recuerdo que cuando estaba tendida en el suelo oí: Mi princesa, lo siento te tengo que volver a dejar. Y después se marchó, no supe mas de él, me dejó, otra vez, pero esta vez me dejo sus ojos grabados en mi cabeza. Ese sigue siendo mi único recuerdo de antes del accidente..







''Esta es otra de las primeras cosas que escribí, y le tengo muchísimo cariño''



Esta soy yo.


Creo que aún no me he presentado.

Para presentarme podría decir, mi nombre y mis apellidos.

Después podría decir el color de mis ojos, el de mi pelo, mi talla de pie, la de anillo y todas esas cosas que creo que realmente no importan demasiado.

Para presentarme de verdad, diría : Hola, me gusta la música pop, y me encanta el rap.

Pasaría horas y horas leyendo, y otras muchisimas mas escribiendo.

Diría que me encanta la fotografía, y también el cine.

Que también me gusta el silencio, y que otras veces me da miedo.

Y diría también muchisimas otras cosas, pero la única frase que de verdad estaría bien para mi, al presentarme sería, molestate en conocerme.

Y entro por los ojos.


Me miro al espejo, entro por mis ojos, pretendo colarme hasta el fondo del todoy solo hay palabras que mi lengua no te dijo. Así es mi mirada, por dentro, te aviso, bajo el orificio nasal a salvo salgo de una lágrima con salto mortal.Voy adentro de mi mismo,a ver donde narices se ha escondido el amor. Llegué hasta el corazón y este me dijo: a quien engañas? Quítame las telarañas. Escucha mis latidos porque son la voz más sabia y olvida la razón porque me lleva la contraria. Chao!! Te digo adiós, me voy, hasta la vista!! Últimamente solo le sonrió al dentista. No es que me guste estar triste,pero es que los sueños están hechos de un material tan sensible... Del agua potable de tus lágrimas, con las que hago gárgaras, teníamos motivos antes de que te los cargaras. Ahora que harás querida mía? Si toda tu alegría se ha quedado entre mis sábanas...
Cierto que fácil nunca, nunca ha sido
observaba la vida como la observa un ciego
pues lo que se dice a veces daña
mas lo que se escribe puede herir hasta morir

Punto finál.

Supongo que no soy la única que tiene problemas con sus padres.
Tambien supongo que todos los hemos tenido cuando tienes 15 años.
Tu crees que ellos no te entiendes, ellos que eres tu quien no los entiende.
Yo soy una de esas personas que tienen problemas con sus padres.
No grandes problemas, si no discusiones continuas, gritos, palabras que hacen daño.. No soy la única que los tiene en el mundo.
La verdad es que no me importan mucho los gritos, ni todo eso, por que todo el mundo los tiene en mayor o menos grado.
Es el sentir que no quieres llegar a casa, por que no te sientes querida, por que tus padres no te preguntan que tal te ha ido el día, y si lo hacen, te das cuenta de que es por rutina, que cuando les contestas parece que no les interesa la respuesta.
Es el ver que tus amigas hablan de sus madres, que dicen que les han preguntado por que chico les gusta, que por que se han enfadado con su amiga, o por cualquier cosa por la que a ti tu madre nunca te ha preguntado, y sentir un vacio que no sabes muy bien por que te hace sentirte mal.
Es el levantarte todos los días por la mañana con una promesa en los labios, de que hoy vas a no contestarle a tu madre, vas a tener buena cara para cuando veas a tu padre, vas a no tener quejas cuando digan algo que no te gusta, que vas a ser ''buena'' con ellos, y entonces llega tu madre protestando, diciendo que tienes que darte prisa, que vas a llegar tarde, que no sirves ni para ti misma, y te das cuenta de que no puedes cumplir esa promesa, que ya no son solo sus palabras la que no te dejan cumplir la promesa, si no ese tono de desprecio con el que te lo dice, y que tu no entiendes por que lo tiene a las 8 de la mañana.
Es el tener miedo a tener un problema gordo,por que no confias en ellos, y no saber a quien contarselo. El estar sentada en la mesa callada, sin saber que decir por que el problema te está comiendo por dentro, y que tus padres pregunten que qué te pasa, y no poder decirles que tienes un problema enorme, por que sabes que no van a intentar comprenderte, ni van a ayudarte, solo van a echarte un sermón, como si tu tubieses la culpa del problema, y que no entiendes por que te lo dicen eso a ti, cuando en realidad es el problema de un amigo, o de alguien que conoces, y cuando les dices que no te tienes que decir eso a ti, que no tienes nada que ver con eso, ellos contestan que ya lo saben , pero que te lo dicen para que lo sepas, y tu te quedas con cara de tonta y con un sermón que te hace quedarte peor de lo que estabas, y sin ninguna solución.
Es llegar a casa y decir que quieres hacer culquier cosa, que te hace mucha ilusión, y oir como dicen:: si, seguro.., a los dos días te cansarás.., con lo torpe que eres.., o que seguro que harás la risa.. Es sentir que hagas lo que hagas nunca te van a apoyar, que no creen que puedas ser buena en nada, y ver como se ''rien'' de todas las cosas que a ti te hacen ilusión.
Es ponerte a pensar en cuando eras pequeña, después de una bronca con ellos, y solo ser capaz de acordarte de dos veces que has echo algo divertido con ellos, que te llebaron al cine,y que te llebaron a una carrera del cole, en cambio acordarte de que tu abuelo te ha enseñado muchas cosas , de que siempre te llebaba al parque, de que jugaba contigo, de que tu tata se te llebaba por ahí con ella cuando eras una enana, que te pintaba las uñas de mil colores, que jugaba contigo siempre, de que tu abuela te contaba cuentos para que te durmieras, de que tu otro abuelo te llebaba a pescar cangrejos, de que casi siempre que ibas a sitios fuera de la ciudad era con tus abuelos, de que siempre que hacias algun postre tambien era con tu abuela, de que una amiga de tu madre te dejaba hacerle mil peinados, y pintarla de mil maneras, de que cuando mejor te lo pasabas era cuando venia tu tia y tu prima a casa por que con ellas si que jugabas ya que tus padres no querian que les pintaras nunca, ni que les peinaras, ni nada de lo que ati te gustaba. Es acordarte de todo eso, y darte cuenta de que solo hay dos putas cosas que te recuerdan a tus padres y que ni siquiera te hacen especial ilusión.
Es el llegar a casa después de un dia de mierda en el instituto, y ver que tu padre está muy ocupado hablando por telefono por su trabajo, que tiene tiempo para ayudar a muchas personas, para preguntarles por sus problemas pero que para ti no tiene tiempo nunca, y te acuerdas de que hace mil años que no hablas con él sobre nada, y decides empezar a hablar con él en la comida, pero sale algo en la tele que es mucho mas importante que lo que tu vas a decir y te mandar callar y a ti ya se te quitan las ganas de hablar.
Es ponerte a escribir, que es lo que mas te gusta en este mundo y darte cuenta de que tus padres nunca han leido nada de lo que has escrito, y que si lo han echo han sido cuatro lineas, y ni si quiera han dicho nada.
Es sentir que tu nunca eres la prioridad, y que muchas veces te dan caprichos (de esto no me quejo, por que me han dejado hacer muchas cosas que a mucha gente de mi edad no), pero luego sentir que enseguida te lo echan en cara.
Es tener tantas cosas guardadas que no eres capaz de no enfadarte con tus padres por cosas que sabes perfectamente que ellos no tienen la culpa.
Es sentir que te valora muchísimo mas cualquier persona que tus padres.
Es oir como te dicen que si ellos te trataran con tu los tratas a ellos no te gustaría, pero ver que no se dan cuenta de que te comes la cabeza mil veces por su culpa, por que a lo mejor no te contestan ni te ponen mala , pero hacen o dicen otras cosas que a ti tambien te hacen mucho más daño del que ellos creen, y ni siquiera se dan cuenta.
Es el darte cuenta de que parece que tus padres creen que con pagarte clases particulares, dejarte llegar tarde a casa, y dejarte hacer muchas cosas es suficiente, y no debes pedirles nada más.
Es darte cuenta de que quieres irte de tu casa, de que quieres irte a vivir con tus abuelos, por que sabes que si sigues dia tras día así con ellos acabarás odiandolos, y tampoco quieres eso.
Es el haberte preguntado mas de una vez cosas tan fuertes como el si quieres a tus padres y no tener clara la respuesta.

Este es mi punto de vista, que no quiere decir que todo sea igual que lo que yo veo, por que supongo que ellos lo veran de otra forma muy distinta pero ..
Por supuesto , no siempre ellos tienen la culpa de que nos peleemos y todo eso, pero no se, estoy tan saturada con este tema que necesitaba escribir sobre ello.

etc, etc , etc

Vuelvo a ser un mar de dudas. ¿De verdad no se lo que siento o no quiero saberlo?
A lo mejor es verdad y solo me empeño en fijarme en otros chicos para tapar lo que de verdad siento. Cualquier persona que me conozca, que me vea dia a dia diria que me gusta llamemoslo X. Pero ¿y yo?. ¿Que veo yo? ... Yo no quiero ver nada, por que en realidad se que hay algo muy grande. Algo que me late en el pecho y que tengo que guardar para no tener que llorar....

Voy a contarte mi secreto. Sientate en mi sofá. En el sofá de María


Los dos se sentaron en el sofá y se taparon con una manta tapándose por completo, y empezaron a ver la película abrazados.

Cuando la película casi estaba acabando, y los chicos ya habían perdido todo el interés por verla, buscaron una nueva distracción, y comenzaron a besarse con ternura y desenfreno a la vez,

De los besos pasaron a las caricias. Se deshicieron de sus camisetas, y acercaron todavía más sus cuerpos. Alfonso buscó los corchetes del sujetador por su espalda. Los desabrochó tímido, y comenzó a acariciar lentamente lo que nadie antes había acariciado. María lo besó por el cuello, se agarró a su pecho, sintió los latidos de su corazón. Sintió que lo amaba, que todo lo demás le daba igual. Él siguió acariciándola, ella se dejó hacer. Se desnudaron por completo. María sabía lo que iba a pasar si seguían, pero no paró a pesar de sus miedos.

Se separaron. María quito la película del reproductor, y puso el CD que horas antes había escuchado mientras se bañaba. Alfonso buscó por el salón la caja de condones y sacó uno. Se lo mostró a María y ella asintió con la cabeza.

Volvieron a besarse, locos, enamorados, y perdidos en el deseo de quererse de otra forma.

Ella se tumbó en el sofá, él le siguió y se colocó encima. La miró. Vio en ella la chica perfecta, la que había buscado toda la vida. La amaba, y ahora se lo estaba demostrando haciendo el amor con ella, en su sofá. En el sofá de María.

Justo en el momento en el que sonaba Stand By, él entró dentro de ella.

Estaban el uno dentro de otro. Sus músculos se contraían y se relajaban.

Se dejaban querer el uno por el otro. Se acariciaban, se besaban y gemían, todo a la vez.

Un par de horas después, empapados en sudor, se abrazaban en el sofá.

Ella jugueteaba con el pelo de Alfonso y él le correspondía dándole golpes suaves en la nariz.

-Oye, ya es tarde. Mis padres estarán al caer a si que mejor nos vestimos y recogemos esto.

-A sus ordenes Lady Madrid.

María se sorprendió muchísimo-¿Lady Madrid? Hace mucho tiempo que no me llamas así.

-Bueno pues hoy te llamo así. Hoy es un día especial.

-Me encanta ese nombre, pero ¿Por qué me llamabas así?

-No me lo puedo creer. ¿De verdad no te acuerdas?

-No, pero cuéntamelo que me muero de curiosidad...

-A ver si así te suena. La estrella de los tejados, lo mas rock and roll de por aquí... –María sonrió y continuó la canción. …Los gatos andábamos colgados, Lady Madrid, pitillos ajustados…-Bueno, ¿te acuerdas ya?

-¡Pues claro que si! Lady Madrid, la canción de Pereza que me encantaba.

-Siempre la andabas cantando, me hacia mucha gracia ver como repetías una y otra vez el estribillo.

-Si, si. Tu siempre buscando alguna excusa para reírte de mi.

-Anda calla tonta, que sabes que te quiero un montón.

María le tiró un cojín a la cara y le hizo la burla.

-Si yo en el fondo también te quiero...

-¿En el fondo? Pues cuando estábamos en el sofá no pensabas lo mismo.

-¡Oye cállate que lo estropeas! Además, lo decía de broma. Yo te quiero un montón.

-Perdona… Anda, ven y dame un beso.

Se besaron tiernamente, cuando en el CD en el que antes había sonado Stand By, ahora sonaba Como lo tienes tú, de Pereza.

idiotas que juegan a..

- Y tú ¿Qué sientes?
+ Que ¿qué siento?, siento un nudo en el estomago cada vez que te veo, siento una mirada profunda a través de tus ojos, siento como el mundo se me vuelve grande cada vez que se te acerca otra tía, pero lo que mas siento, es aquel aprecio que te tengo, aquel sentimiento que en su momento me hizo feliz, y sobre todo, un amor que nunca funcionará entre nosotros.
- ¿ Y por qué crees eso?
+ Porque por mas que te diga mis sentimientos, no dejas de mirarla, de pensar en ella, de tenerla entre tus brazos, sin pensar el daño que causes a los demás, porque realmente la quieres a ella, y yo solo soy una amiga más en tu vida.
- Sí, es cierto, tienes razón, pero en los sentimientos no se mandan, y por más que piense en ella, sé que ella no va a pensar en mí, por más que sueñe con ella, esos sueños jamás se cumplirán, no siempre todo es un mundo de colores, la gran parte es un mundo de color gris, y lo que más deseo es quererte como la quiero a ella.

Lunes, 10 de Enero de 2011

Lunes:
Hace un tiempo que no uso esto de diario. Ya toca.
El año pues ha empezado. Sin ir bien y sin ir mal. Ha empezado y ya.
Las cosas mas o menos como siempre.
Cada día se me va mas la cabeza, aunque creo que eso no esta mal del todo. Cualquier dia le darán por culo a todo y me dará igual quien este de mi lado y quien este en el de enfrente.
No se por que , pero estoy cansada de todo. De ver la misma mierda dia tras día. De hacer el gilipoyas por los demas. Lo peor es que hay algo que siempre tira mas que yo y acabo cediendo.
Cada vez me veo mas lejos del que se supone es mi mejor amigo, por que yo ya no se que es.. Bueno si lo sé, demasiado bien lo se. Lo que no se es lo que soy yo para él. Yo tambien me canso de no saber que coño decir aunque el no lo pueda ver.
Cada día tengo menos ganas de escribir. Tengo mil cosas por ahí a medias.
En fín , cada uno a lo que toca señores.

m3

RALLA ENE RALLA

Escucho mil canciones. Ya ninguna me hace sentir. ¿Donde coño he perdido las ganas?
Estoy sentada en el suelo, el futuro que lejos de mi. No tengo ni idea de a que coño estoy jugando,y tampoco me importa demasiado. Hace unos meses que alguien le ha dado al stop y me ha dejado aquí encerrada.
Alguien ha tocado los cables y los ha cambiado de lugar. He cambiado, me han cambiado.
Parece que la vida quiere que aprenda. pero ¿el que?. Sea lo que sea, parece que tiene que ser a base de palos.
Eh. Eh. Si, te digo a ti. Quiero que me conozcas mejor. Como soy una chica sin secretos voy a contarte algunas cosas que no sabe casi nadie. Atento.

Cuando escribo a mano mis diarios o mis textos solo escribo con un boli gordo.
Me gusta el jazz.
Mis planes de vida se dibujan en otra ciudad distinta a la que vivo ahora.
Me pone nerviosa que me miren cuando estoy andando por que creo que tengo mal el pelo o algo así.
No me gusta que me comparen con mi prima o mi tata.
Me gustan mucho mas los deportes de ''chico'' que los de ''chica''.
Después de ver una película me entran ganas de hacer lo que estaban haciendo en la película.
Normalmente solo leo de noche por que es el único momento en el que hay silencio en mi casa.
Prefiero escribir de noche por que me gusta escribir a oscuras y sin ruido.

Chocar con la realidad.

Siempre solo abrazado al miedo escondiendo la vida, el calor tan esquivo a mostrar lo de dentro cerrando la ventana al exterior. Tan sensible que costaba aceptarte en ti siempre veías lo peor solitario, débil, pequeño y frágil el mundo no te supo dar amor.Y es que existe una linea que es tan fácil que el sensible la traspase que coloque lo peo ry es que vivir en esta vida siendo frágil gustarte o no gustarte te da un sitio o tal vez no.

Suena

Hace poco leí que todas las infancias tienen un sonido. Nunca había caído en la cuenta de que eso es cierto. De que algunos tienen como sonido de la infancia el ajetreo de un negocio familiar, otros de viajes y viajes, otros de música de musicales.
El sonido de nuestra infancia siempre está relacionado con el sonido que en ese momentos oigan nuestros padres.
Yo nunca me había parado a pensar cual era el sonido de mi infancia, pero en cuanto leí aquella frase me dí cuenta de cual era mi sonido. Enseguida vino a mi cabeza el sonido de las manifestaciones, de los gritos de la gente, de las reibindicaciones, de los pitos sonando, de esa canción que mi abuelo me enseñó, ''Aznar enano, al fondo del pantano'' decía..
Son tantos los sonidos que tiene la vida, que es curioso que el que marque lo se seremos lo tengamos que oír tan pequeños.

touché

y cuando nos damos cuenta aparecemos cada vez mas cerca de decidir nuestros futuros, mas cerca de escoger un camino erronéo, de decir adios a grandes amigos, de dejar claro que nos perjudica y que nos ayuda, de elegir entre lo agradable y lo correcto, o de escapar de verdades irrefutables que intentamos evitar.

Principios.

[Esto es una de las primeras cosas que escribí, y por lo tanto es algo lleno de recuerdos, y de miedos expresados en forma de palabras.]

Y ahora por un momento me he sentido más sola que nunca, me quedé pensativa mientras escuchaba el alborotar de los pájaros que entraba por la ventana abierta de mi habitación.
Mientras escribo esto no puedo dejar de pensar en mil cosas que no me puedo sacar de la cabeza como que pasará al año que viene cuando empiece el instituto o si mis amigas y yo seguiremos juntas o nos separaremos.
No entiendo por que crecer es tan difícil, realmente no me gusta crecer pero si hacerme mayor.
Al hacerme mayor voy descubriendo cosas que me encantan, pero al crecer, siento como si dejara atrás mi niñez para dejar paso a ideas de “Chica mayor”.
Dejar atrás mi niñez no se me hace fácil, pero no creo que para nadie los sea, un día te despiertas y has pasado de jugar a las mamás a pensar en que ropa ponerte para ir lo mas mona posible, es un cambio muy radical al que me tendré que acostumbrar pero no es el único, todo tu cuerpo también cambia, te empiezas a fijar en cosas que nunca antes te fijaste como en los chicos y empiezas a hacer tonterías por ellos, te empieza a preocupar más tu aspecto, empiezas a crear tu propio estilo. No solo cambia eso, enseguida cambias a tu madre por tus amigas, cambias tu forma de ser y ahora ya no te gusta que nadie te besuqueé ni te diga cosas como pimpollo a cielo; para ti eso ya es cosa de niñas pequeñas, pero no te das cuenta de que en el fondo y como todo el mundo, tu siempre tendrás tu pequeño trocito de corazón ocupado por esa niñita que algún día fuiste, esa de la que te gusta recordar cuando al hacerte mayor te caen más responsabilidades encima o algo te sale mal; entonces te pones a pensar y esa dulce e inocente niña que hace algún tiempo fuiste se cuela en tus pensamientos y aunque sin darte cuenta te obliga a dibujar una pequeña sonrisa en tu cara, entonces aun piensas más y encuentras la razón de porque eso salió mal o porque te callo encima esa responsabilidad.
Ese es en el momento en el que sientes una gran añoranza de tu feliz niñez sin preocupación alguna y te preguntas: -¿Por qué tuve que crecer?,pero en eso momentos se cuela algo maravilloso que te ocurrió al crecer y te obliga a borrar tu niñez de tu cabeza por unos instantes.
Al día siguiente te levantas temprano pensando en que en que hoy te comerás el mundo dejando atrás lo que pensaste ayer pero lo único que puedes hacer es pensar en ese estúpido aun que guapísimo chico que te enloquece, pero al pasar por delante de un parque tu mirada se centra en los incómodos columpios en los que de pequeña te solías montar olvidando todo lo demás, entonces te entran ganas de montarte en uno de ellos, te sientas y al volver a sentir en tus manos el frió de las cadenas del columpio te echas a reír sin saber por que y entonces comprendes que nunca serás ni tan mayor como para no montarte en un columpio ni tan pequeña como para no volver a tener responsabilidades.

Yo tambien tengo una historia



Todo empezó un 5 de marzo de 1996. Asomé la cabeza a este mundo a una hora en la que nadie de mi familia se pone de acuerdo.
Me han contado muchas veces cómo fue el primer cuento que escuché en mi vida.
A los pocos días de salir del hospital, mi abuelo me cogió en brazos y comenzó a contarme una historia en la que la protagonista era una sencilla princesa, que crecía, vivía, tenía sueños, y llenaba hojas y hojas de papel con sus historias.
Nunca me lo han dicho directamente, pero yo sé que mi abuelo, se refería a mí con esa princesa. Lo que no se, es como supo que mi vida sería así, quizás él fue quien se ocupó de inculcarme ese amor por la lectura.
Crecí rodeada de cuentos, de historias, leyendas, y de todo lo que se pudiera leer.
Supongo que mi abuela también ayudó a que me aficionara a la lectura, por que cuando todavía no tenia ni tres años, y dormía en su casa, cada noche se sentaba en mi cama, me acariciaba la cara y me decía que escuchara muy atenta, por que me iba a contar un cuento. Con ella aprendí el cuento de Caperucita Roja, el de Ansel y Gretel, el de Los Cabritillos, El guisante y la princesa, o Pulgarcito entre muchos otros. Yo no tenía ninguno favorito, por que cada vez que los contaba, variaban los detalles, y a mi me gustaba jugar a imaginar que pasaría hoy. Tengo muy buenos recuerdos de esas noches en las que me dormía escuchando un cuento, y a veces los soñaba.
Mi madre también ayudó. Cada noche me contaba mi cuento favorito. El de los pitufos.
Lo narraba desde el marco de la puerta de mi habitación, una vez tras otra hasta que mis ojitos se cerraban vencidos por el sueño.
En mis primeros cumpleaños, recibí bastantes cuentos y libros como regalo. Algunos todavía los conservo, otros ya se perdieron en el tiempo, o se los regalé a mis primos.
Pronto entendí la lectura como algo divertido. Una ventana a un mundo nuevo, en el que yo era dueña de lo que pudiese pasar. Me gustaba imaginar que yo era la princesa que escapaba en un corcel blanco con el príncipe, o la bruja del cuento, y hacía hechizos para evitar que la princesa escapase, y a veces era todos los personajes a la vez. Me lo pasaba muy bien entre libros.
Fui creciendo, y cada vez me gustaba más y más leer. Ahora era yo quien contaba los cuentos a mi familia, y como mi abuela me había enseñado a veces variaba los detalles para contar siempre el mismo cuento, pero de una forma distinta.
Me gustaba el parque, y salir a jugar a la calle con el balón, pero a veces prefería quedarme en casa leyendo mis libros.
Con seis años, me regalaron un libro, que aun conservo entre mis preferidos, y que fue lo que me terminó de convencer de que el mundo de la literatura es un mundo mágico, y en el que cada día puedes vivir una nueva historia, o incluso puedes inventar la tuya propia.
Cuentos para soñar se llama. Lo conservo con gran cariño, por que además de hacerme soñar, me encanta la dedicatoria que mi padre escribió en la primera hoja: Para que tu vida sea un cuento y no un sueño.
Me gustaba que mi madre me lo leyera por las noches.
Me gustaban todos los cuentos menos uno: Serafina no creía en brujas. Me daba miedo que una de esas brujas apareciera en mi cuarto, aunque también había alguno que me gustaba muchísimo, como El ultimo juguete, o Linda, la hormiga preciosa.
Entonces me gustaba que mi madre me leyera esos cuentos, ahora me gusta leerlos a mi, y a veces, por la noche, aun lo hago, y me pierdo por los mismos cuentos en los que hace unos años lo hacía, y así volver a tener en mi el recuerdo de esos mundos mágicos, que según vas creciendo se hacen mas difíciles de encontrar, aunque yo me esfuerzo cada vez que abro un libro por encontrar dentro de el uno de esos mundos.
Y me pierdo por esos mundos, y a veces de esos mundos surgen las historias que yo escribo.
Pronto dejé de conformarme solo con leer, y empecé a escribir mis propias historias.
Todavía conservo algunas, y con el tiempo he mejorado, pero por algo tenía que empezar.
Escribía todo lo que se me ocurría, a menudo eran historias de niños, con una carilla de un folio.
No revisaba las faltas de ortografía, pero las leía una y otra vez, e incluso a veces modificaba su contenido, y cuando tenía algo que me gustaba, corría a enseñárselo a cualquiera que estuviese en mi casa.
Cada vez leía más. Libros más largos, con más jugo. Y cada vez me gustaba más también.
Y según leía cada vez más, mis historias cada vez eran mas largas, con argumentos distintos.
Mi primera historia larga, y más o menos bien escrita, la escribí en cuarto o quinto.
Trataba de una chica china, que tenia que encontrar un tesoro, que su maestra de kung fu, le había escondido, para que pudiese ser reina.
La recuerdo con cariño, por que fue la primera vez que les enseñe a mis amigas lo que escribía, y les gustó muchísimo. También les gusto a mi profesora, y a mi abuelo, al que llevo años enseñándole la mayoría de cosas que escribo. A veces él me pregunta si aun escribo, y yo con una sonrisa le contesto que si. La verdad es que me siento orgullosa de seguir haciéndolo, por que escribir me hace libre. Nadie puede decirme lo que debo o lo que no debo contar en mis textos. Son míos, solo míos, y de quien yo quiera.
Pronto descubrí otro género literario que me gustó mucho. La poesía.
También empecé a escribir pequeñas poesías, sin demasiado acierto, por que nunca había leído poesía, pero a mi me gustaba escribir.
Conservo la mayoría de las cosas que escribí en esos años. Y las comparo con las de ahora, han cambiado mucho. Pero todas me gustan mucho, por que las escribí por que era lo que me gustaba hacer.
Guardo un bonito recuerdo de unos libros que leí cuando tenía unos diez u once años.
Trataban de una chica que se llamaba Joody Moody, y aun los conservo.
Por un tiempo fueron mis favoritos, hasta que empecé a descubrir otros que también me gustaron mucho como Las Crónicas De Narnia, o demás libros de fantasía.
A veces buscaba por las estanterías de mi casa y cojia algún libro de mis padres y lo comenzaba a leer, aunque pocas veces los acababa enteros, por que me gustaban más los míos.
Seguí escribiendo. Hubo un tiempo en el que dejé de escribir historias y solo escribía poesías. Algunas quedaban bonitas, otras no, pero me daba igual por que reflejaban mi esfuerzo.
Desde que tenía unos doce años, mis libros favoritos empezaron a ser las novelas románticas de adolescentes con amores prohibidos o bonitos, pero siempre los libros que más me gustaban eran en los que aparecía una chica con la que me sentía identificada.
En esta etapa de mi vida deje de escribir casi por completo, y también dejé de leer habitualmente, y solo lo hacía en ocasiones.
Volví a coger la lectura con ganas cuando descubrí un libro que trataba de un tema que me llamaba mucho la atención; la anorexia. Myriam es anoréxica se llamaba.
Después de ese libro leí: Hola, ¿Está María?, Soledades de Anna, La Ciudad de las bestias, Ghostgirl, Cenicienta siempre quiso un wonderbra, Paula y muchos más hasta que descubrí uno libro que me encantó. Tres metros sobre el cielo de Federicco Moccia, y después su continuación: Tengo ganas de ti. Este último me gusto mucho mas, por que lo leí mientras estaba en Italia, y pude visitar los lugares que aparecían en el libro.
Además el lugar en el que leía era precioso. Un balancín en el porche de la villa, desde el que se veían los viñedos, y al atardecer aparecía el sol naranja por detrás. Me enamoré de esos libros, me enamoré de Italia.
Releí esos libros un par de veces cada uno, y cada vez me gustaban más y más.
Inspirándome en la historia de Baby y Step, empecé a escribir una historia que no creí que pudiera superar las dos hojas, pero ya llevo unas catorce. El sofá de María lo titule.
Después de esos libros leí Canciones para Paula, otro libro que me gustó mucho, y del que también cojín algo de inspiración para mi historia.
Y hasta hoy, el último libro que he leído es Los juegos del hambre, que me ha parecido un libro realmente bueno, que me hizo descubrir un mundo que jamás habría podido imaginar y ya estoy deseando tener su continuación en las manos, para poder seguir el camino de la lectura.
Mi historia como lectora no acaba aquí, ya que tengo ganas de seguir ampliando mi colección de títulos leídos, y tampoco acaba aquí mi historia como ‘’escritora’’, por que voy a continuar con mi novela, y quizás algún día podáis encontrarla en alguna librería.

tu eres mi vida

Analizo mi vida..
Lo primero que veo es que pongo MI, pero en realidad no es mía, por que la comparto con todas las personas que me rodean, las que veo día a día, las que veo poco y las que nunca mas veré.
Tantas veces me juré a mi misma no cambiar nunca, y ahora mírame..Poco o nada queda de lo que era hace unos años.Puede que ahora sea lo que mas de una vez he criticado, pero la vida pasa, y yo paso con ella.Tantas veces prometí no enamorarme, y aquí vuelvo a estar yo, enamorada. y otra vez mas de un chico imposible.Repaso cada día de mi vida, segundo a segundo..Cuanto he crecido me digo a mi misma, cuantas cosas son distintas en mi. Mi pelo, mis ojos, mí sonrisa.. casi todo ha cambiado, creo que solo queda la parte que me obligan a guardar cada vez que dicen '' no te olvides de donde vienes, de lo que eres''. Tal vez quiera olvidarme de lo que soy y empezar otra vez.. Pero como no puedo borrar mi pasado, hoy me veo como soy..Hoy, con 13 años.. todavía no se con exactitud lo que quiero ser, pero para eso aun queda mucho tiempo.Me quedan todavía demasiadas cosas por descubrir como para sentir que ya lo he vivido todo, y me gusta esa sensación que surge de mi cada vez que me enfrento alo desconocido.Como a todos, a veces me gustaría escapar de mi vida, perderme y luego descubrir.. A veces descubrirme, a veces descubrirte, a veces descubriros, solo a veces..Y otras veces también siento que puedo planear yo sola el asalto al mundo, que puedo robar ilusiones, romperlas, como tantas veces me han echo a mi.. pero cuando sabes lo mucho que eso duele no es tan divertido..A pesar de todas las ostias que me he llevado, sigo aquí, depie y luchando por que mañana sea un día mas bonito que el de hoy, aunque a veces sientes que no puedes, que te faltan ganas.. y entonces la gente te pregunta que te pasa.. Si te conocieran de verdad sabrían lo que te pasa.. Serian de esos que te han visto llorar, por miles de motivos, los que te han visto gritar de emoción, con los que has cantado a lo loco, con los que has pasado muchos días de tu vida, y los que pueden decirte MI VIDA , por que en realidad tu les debes la vida a ellos.

y otra foto, y otra más..

Repaso tus fotos. No es ninguna novedad. Lo hago cada día, mil y una veces a la hora y a saber cuantas veces a la semana… Creo que no alcanzo a contar tanto.
Hay fotos bonitas, fotos graciosas, fotos no tan bonitas...
En la mayoría sonríes, y juego a adivinar cual será el motivo de tu sonrisa.
Y a veces juego tanto, que llego a imaginar cosas tan imposibles, como que una de esas sonrisas es por o para mí.
Lo que daría yo por tener tu sonrisa…
Y por probar tus besos sin estrenar, y tus abrazos, y por poder mirar tus ojos sin miedo...
Tus ojos... He visto ojos mucho mas bonitos que los tuyos, pero yo quiero mirar los tuyos, por que son los únicos que me transmiten tanto con tampoco.
Confío más en ti que en algunos de mis amigos. Y es que se me hace fácil hablarte, por que sé que nunca me vas a decir que todo lo estoy haciendo mal, que la culpa es mía... No, tú no eres así, te sale de forma natural ayudar a las personas.
Tienes tantas cosas buenas...
Pocas personas te tratan como en realidad mereces, y yo aunque conozco cada una de tus virtudes (o las que me has dejado conocer), puede que a veces no las valore lo suficiente...
Perdón por no valorarte como te mereces...
Me gustaría ponerme delante tuya, y gritarte a la cara que pases de todas esas personas que sabes que te hacen daño, pero que no las quieres dejar por el miedo a la soledad, pero nunca vas a estar solo, por que a mi siempre me tendrás...
Y también me gustaría gritarte que no tengas miedo de expresar lo que sientes, ni de ser como eres, ni de querer lo que quieres...
Paso a la siguiente foto. Que foto tan bonita…
Sales abrazando a una chica, de sobras se quien es ella…
La envidio. Por que ha probado tus abrazos, y seguramente también tus caricias, y tus cumplidos, y tus sonrisas bonitas, y tus ánimos... pero sobre todo la envidio por que la quieres...
La quieres, y no poco. La quieres de esa manera en la que yo siempre he querido que me quieran, y que la persona que me quería era curiosamente, igual que tú...
Paso otra foto ,y otra, y otra..
Y cada foto que paso, te metes un poquito mas en mi piel.
A sí que voy a dejar de pasar fotos, no vaya a ser que pases de mi piel y te metas en mi corazón..