No jueges con las cosas fragiles

Arrodillado. Rendido delante del inodoro. Usando el índice y el corazón como jamas pensaste que lo harías. Rozando tu campanilla. Provocando algo que no tiene sentido, que ni tu sabes el por que de lo que estas haciendo. Ya está todo fuera.
En tus ojos lágrimas de miedo. Te asustas a ti mismo pero no puedes parar. Son las palabras de los demás en tus oídos lo que te impulsa ha hacerlo. Es el miedo a que no te acepten, a que no te quieran. Es el miedo a ser como eres en realidad.
Te miras al espejo y ves algo que te gustaría cambiar. Ves algo que odias. Te ves a ti. Ves que no te aceptas. Te ves difuminado.
Día tras día repites lo mismo, incluso varias veces al día. Te arrodillas y te rindes. Si no lo haces te sientes mal, culpable.. ¿Culpable de que? De no se lo que todos esperaban.
Esto no eres tu. Es solo lo que quieren que sean, y tu forma de rendirse se llama anorexia y bulimia.